Tiene 96 años, pero parece de 16. Se traslada de ciudad en ciudad, haciendo estadías breves, y nunca repite destino, aunque algunos extraña.
Se hace pasar por adolescente y se inscribe en colegios para cursar materias que ya sabe de memoria, hasta que algún pibe la invita a un bar.
Tras emborracharlo, lo lleva a su casa y se lo devora durante el fin de semana, mientras prepara la valija para irse satisfecha y rejuvenecida a otro lugar.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario